domingo, 10 de febrero de 2013
SUEÑO DE UNA NOCHE DE VERANO
SUEÑO DE UNA NOCHE DE VERANO
Aquel café expreso aún rondaba en la cabeza, el humo del cigarrillo, las velas encendidas, los susurros, la multitud de cuerpos emergentes y nada didácticos que revestían el lugar de lunas académicas (entre el cuarto menguante y tus pupilas llenas) Hallie esperaba en la mesa del final (con veinte años elegimos el oscuro rincón de los sueños) y plegaba los labios a la taza como quien escala un monte helado lleno de musgo, resbaladizo y secreto. Aparecería el hombre que amaba los gatos, ese que llenaba los pinceles de colores trémulos y que habia perdido la virginidad masculina hace un puñado de horas. Lo conocía de lejos, lo vigilaba en secreto desde su ateneo (entre libros de Anaïs Ninn y Henry Miller, con bastante opio espiritual en el cerebelo) No sabía muy bien como olía pero podía sentir en el paladar su boca y el café expreso que quemaba la garganta.
Alli estaba, había entrado con ese aire venusiano que lo definía.Traía un abrigo azul oscuro y unos lienzos en la mano. Miraba hacia el norte con sus ojos protagonistas y sus tinieblas, en parte aprendidas y en parte ovuladas, por su alma. Venía de una noche poco cívica, anacrónica y ardorosa.También buscó la última mesa, necesitaba ordenar las emociones fuertes y beber algo revitalizador, con bourbon, si fuese posible.
Alea iacta est, habia dicho Julio César, las cartas estaban echadas, era la hora de la verdad pura, ésa que no se deja seducir por los movimientos del tigre hambriento y que no puede escapar de su despótico camino de piedras blancas. En los próximos minutos temblaría la historia personal de Hallie y el hombre de los gatos quedaría atrapado en un terceto de seda vaporosa (de esos que no pueden morir nunca)
Te soñé , impreciso y perfecto a mi tacto, libre y nuevo, dijo Hallie con la taza en los labios. No puedo quedarme, contestó el hombre moviendo las manos, soy un ser imaginario aunque tenga erecciones y administre imperios de belleza. No correspondo a tu oniria más que en determinados instantes. He viajado mucho, soy el forastero, el gran Pater, una columna griega que resiste el viento y la soledad; a veces cedo a mis impulsos y los deposito en la semilla de mi descendencia. Tendré pronto un hijo y ya está en otro vientre.
Aquel lugar con mesas, café y humo guardaba silencio, un minuto o dos como cuando muere la sentencia de los dioses y los humanos decantan lágrimas y tenebrosos presagios. Los finales son sólo despedidas efímeras, intervalos de bourbon mojando los labios, tazas que huelen a saliva enamorada.
Hallie Hernández Alfaro- Venezuela
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Hallie Hernández Alfaro. Nació en Caracas, Venezuela. Tiene lazos profundos e inmensos con la Argentina. A España la lleva en el oasis de la sangre. Reside al norte de Holanda.
Participa y trabaja en Alaire: espacio que constituye un aula magna de Poesía.
Ha publicado poemas en las siguientes Antologías y Revistas:
Antología, Alaire, 2008 (14 poemas)
Antología , Poetas en Libertad Ocho (2 poemas)
Revista literaria Aguamarina Número 111. Octubre 2009
Revista literaria Aguamarina Número 115-116 Junio/Agosto 2010.
Se publicó un poema suyo a finales del 2007 en una revista de la alcaldía de Burriana (por Ramón Usó Guerola, excelentísimo fotógrafo y gran amigo)
En el día internacional de la Poesía año 2009 fue seleccionado el poema "Eterna" en un diario local de San Luis, Argentina.
En abril/ mayo 2013 se presentará la nueva antología de Alaire. Participa alli con 300 versos.
Fuentes de Documentación
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5 comentarios:
Me encanta, Hallie. Tiene mucha magia. Es poesía pura.
Me produce sensaciones...
Un abrazo
Bienvenida a este espacio de Poesía de mujeres
Ana
Aparte de un desarrollo muy evocador y sugerente me ha impactado el final. Tan limpio, tan claro pero trágico y contundente, que hace que la joven amada, a mi modo de ver se quede pegada a la silla sin saber de qué modo aprender a vivir con esed vacío que le acaba de nacer y que tiene que poseerla al completo. Un beso
Muchas gracias, Antonio, por tus palabras. Sí, es sugerente como bien dices y el final es demoledor...
Admiro mucho a Hallie.
Un abrazo
Ana
Es una apoema cuyo sentido enbarga sentimientos muy profundos, desde lo simple hasta lo complejo. FELICITACIONES un trabajo muy bien logrado.
Carlos Fidel, gracias por venir a compartir tu opinión. Realmente es un texto poético que transmite. Llega muy profundamente.
Un abrazo
Ana
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